Este trabajo es, de alguna manera e inevitablemente, una continuidad de un solo anterior: “Con lo puesto”:
“[…]Porque abriendo puertas que quedaron atrás cerradas, puedo seguir adelante.”
Así es como empezó a desmadejarse el ovillo, a tejerse el cuerpo de esa pieza.
Ahora, en “[…] Es por mí, por eso […]” sigo adelante pasando por las puertas que se abrieron en “Con lo puesto” y por otras que quedaron abiertas en su día, al vivirlas desde el “sí”.
Por ello, también cuenta como “remade”, como deconstrucción para izar otra estructura que pasa también por puntos vividos, pero desde las antípodas, desde el “sí”, con el “sí”. Y un sí no condicional.
Por eso, entre otras cosas, ya no puede ser “Si por mí fuera”. Por eso, y porque evoluciono, y la pieza evoluciona, seguimos en constante movimiento.